Cuando nos aconsejan dar TIEMPO DE CALIDAD a nuestros hijos, en muchas ocasiones nos estresamos, pues nos parece que no lo estamos haciendo. Y que nos gustaría mucho hacerlo, y nos decimos “pero si no tengo tiempo ni para mí, ¿cómo dar de lo que no tengo? y de adicionalmente, ¡¿que sea de calidad?!”
¡Vaya que me ha pasado!, y me ha tocado usar algunas estrategias para seguir creciendo en mi misión de ser la mejor mamá de mi mundo. En este artículo te doy algunas, y en otros artículos te daré más. Empecemos:
Vamos a relativizar las expectativas respecto al temido TIEMPO DE CALIDAD, pues muchas empezamos imaginándonos que debe ser de una cantidad de horas diarias con las que no podemos cumplir.
Y allí empieza esa vocecita, que tanto conocemos, a decirnos que no estamos siendo todo lo buena mamá que esperábamos ser, ya eso te pone en una actitud errónea que tu hijo percibirá, y tú no disfrutarás, lo cual disminuirá la calidad de ese tiempo compartido.
Los niños no tienen la misma manera que un adulto de percibir y contabilizar el tiempo. Pon eso a tu favor y comparte esos minutos que para él(ella) son TIEMPO, son PRESENCIA.
Mientras le cambias el pañal o lo bañas, ese momento mientras limpias el cuarto, o haces la cena, o lo(a) llevas al colegio, aprovecha de
-
Contarles chistes o adivinanzas,
-
Enseñarles cómo se hacen esas tareas del hogar haciéndolas ver como retos de crecimiento,
-
Enséñales nuevas palabras o canciones,
-
Historias familiares, anécdotas graciosas,
-
Incluso si es un bebé podrías tenerlo cerca y hablarle. Tu voz lo acompaña, siente tu presencia, y va aprendiendo vocabulario.
Aprovecha de conectarte con tu lado alegre y optimista y contarle acerca de lo que agradeces de tu día. Así, el TIEMPO DE CALIDAD que te aconsejan compartir con tu hijo(a), se va convirtiendo en un momento de contactar y contactarlo(a) con lo bueno de la vida, que tanta falta te hace a diario. Y al mismo tiempo le estarás enseñando a ser agradecido(a).
También podemos hacerlo de forma exclusiva, es decir, dedicarles, quizá 2 horas o más, a cada uno nuestros hijos por separado, semanalmente. Dedicándonos solo a él(ella).
-
Viendo una película,
-
Yendo al parque,
-
Jugando algo en casa,
-
Dibujando o haciendo algo juntos,
-
Leyéndole un cuento.
-
Las niñas un poco creciditas disfrutan ayudar a mami a arreglarse el cabello o pintarse las uñas.
Para los niños es más simple que para nosotros eso de la CALIDAD. He preguntado a varios niños como les gusta pasar tiempo con sus padres, y sus respuestas han sido, entre otras:
-
Acompañarla a sus cosas que hace en la calle.
-
Estar juntos en la casa toda la familia.
-
Que me acompañe a la práctica de futbol.
-
Que me busque en el colegio.
-
Que me lleve a su oficina y me deje usar sus cosas del escritorio.
-
Que salga de compras solo conmigo, sin mis hermanos.
-
Ir al supermercado y ayudar a elegir lo que vamos a comprar.
-
Que me deje hacer el huequito en la tierra y poner la matica.
-
Me gusta resolver acertijos que mi mamá me pone, es divertido y emocionante.